Cambio de líquido refrigerante del motor (y calefacción) y del termostato.

Aprovechando que debía cambiar el radiador de la calefacción (lo cual merece post y consideración a parte) y que culatas tan largas se han de cuidar con un buen refrigerante y un periódico mantenimiento, me decidí a cambiar el termostato y el líquido refrigerante para prevenir disgustos. La vez anterior lo hizo un mecánico aprovechando que tuve que cambiar la bomba de agua, pero de esto hacía 3 años.

Antes que ponerme a hacer nada, como siempre, he consultado el libro taller. En éste enlace podéis encontrar el capítulo completo donde se describen componentes, funcionamiento, y operaciones de reparación y mantenimiento.

Material y herramientas que yo he utilizado:

- Un barreño de 20l
- Embudo
- Llave allen de 12mm
- Llaves fijas de 10 y 13 mm
- Una mordaza tipo pico de loro
- 1 termostato (referencia: STC 3338)
- 15 l. de refrigerante: según el libro de taller, en todo el sistema han de haber 13'5 l.

Y al tajo: con el coche en la posición más elevada de la suspensión, y con el motor frío para no correr el riesgo de quemarme, lo primero que he hecho es vaciar el circuito.

1. Debajo del radiador, más o menos sobre el centro del coche, hay un tapón de purga que se saca con una punta allen de 12mm. Es de plástico y lleva una tórica que se había quedado pegada al radiador.

2. Quito el tapón del depósito de refrigerante (vaso de expansión) y dejo que acabe de caer del todo.
Limpio con un  trapo el emplazamiento de la junta y el tornillo y los coloco de nuevo. Apretar lo justo y sin pasarse, recordad que es de plástico (el manual dice 6 Nm).

Todas las juntas del sistema que se cambien han de lubricarse con refrigerante limpio antes de colocarlas.

3. Enfrente del vaso de expansión, en la pared del bloque del motor, hay un tapón para drenar los cilindros. Tumbado en el suelo se accede bastante bien. Desde arriba és difícil de ver. Cambio el barreño de sitio para que recoja el agua saliente. Aquí salpica más, no está de más tener un cubo y una fregona para limpiarlo todo.

4. Una vez vaciado, cambio la arandela de estanqueidad. El manual no lo contempla, pero el mío lleva una de aluminio. Pongo un poco de Loctite de roscas como dice el manual y aprieto.

5. Y empieza la salsa... el termostato va dentro de una carcasa que está sujeta con 3 tornillos, para acceder al de debajo, el que no se ve, hay que despejar la zona sacando la canalización de la admisión que cruza el motor, su seta de decantado de aceite, el manguito del turbo al intercooler... es un rato pero no es complicado. Para ganar un poco de movilidad, también he soltado el manguito de la calefacción.

  

Aunque no tenga un aspecto de nuevo, los he visto peores. Lo cambio por un  MAHLE - TX 38 80D que abre a 80ºC (11€ en Oscaro) y que además viene con la tórica. La lubrico con refrigerante limpio y deshago el camino andado.

Por el camino yo he cambiado el radiador de la calefacción, pero eso eso da para otro post. Viene al caso porqué ello quiere decir que tube que vaciar todo el refrigerante, incluido el que quedaría en la calefacción, por completo por obligación, así que a la hora de rellenar, hube de proveerme de los 11,3 l. que según el manual de taller, caben en el sistema.

Por recomendación de los compañeros, el refrigerante escogido ha sido el Motul Inugel Optimal. En Megataller me ha salido a 15€ la garrafa de 5l. y he comprado 3.

Para rellenar el circuito, una vez conectado todo en su sitio, verter el refrigerante en el vaso de expansión. Irá pasando por gravedad al motor hasta que ya no entre más.

Arrancar el coche y poner la calefacción para que el refrigerante llegue a esa parte del circuito también. Dejar que coja temperatura y parar. Cuando se enfríe volver a mirar el nivel en el depósito de expansión, y poner a nivel.

Yo he repetido la operación un par de veces más y no ha sido necesario añadir ni quitar. En cuanto al Inugel, de momento parece que funciona. La temperatura medida con el Nanocom se mantiene sobre los 90ºC, pero si se le somete a trato exigente pueden verse los 96ºC, de ahí no ha pasado nunca. En el salpicadero esto se traduce en que la aguja se queda en el medio... lo que da una idea de las precisiones que manejan estos instrumentos... 

Bueno, hasta aquí el post del cambio de refrigerante y termostato... queda pendiente el del radiador de calefacción, que está en proceso. Como siempre digo, no hay ningún ánimo de sentar cátedra, tan solo de ayudar a los propietarios a mantener sus juguetes gigantes sin arruinarse.

Saludos.